El mundo de la gastronomía, desde hace unos años y gracias a innovaciones de chefs como Ferrán Adrià y Heston Blumenthal, ha tenido un acercamiento importante al mundo de la tecnología, especialmente a la tecnología aplicada a la manipulación de los alimentos
Apalancados en la gran popularidad que goza hoy todo lo relacionado al mundo culinario, y en el desarrollo de las redes sociales y plataformas móviles, los grandes chefs (y otros no tan grandes) han incursionado a un ámbito de la tecnología que les ha permitido incrementar su radio de acción y tener un mayor acercamiento a su audiencia, a través del mundo de las aplicaciones móviles.
Desde hace unos años, y con iPhone como abanderado, el mundo de las aplicaciones móviles ha tenido un crecimiento exponencial, tanto a nivel de desarrollo como de descarga y uso de las mismas, convirtiéndose en un medio ideal para intercambiar información y dar acceso a servicios en cualquier lugar, a cualquier momento.
En cuanto a la masificación y popularización de todo lo culinario, es cada vez más importante para un chef tener una presencia que vaya más allá de su cocina o de las de sus restaurantes, o en pocos casos, de las publicaciones y sitios web. Los chefs, como nuevas celebridades, necesitan acercarse a quienes los siguen, necesitan interactuar con su audiencia, y es por ello, que muchos han dado ya el paso de ofrecer aplicaciones para smartphones, ofreciendo contenido relevante y actual a la comunidad.
Como es lógico pensar, quienes han incursionado de manera temprana en el mundo de las aplicaciones, son chefs que ya vienen con un trabajo desarrollado a nivel de medios. Chefs que han publicado libros, que tienen programas en la televisión, o que son constantemente reseñados en diferentes medios.
Tyler Florence, a pesar de no ser el más reconocido fuera de Estados Unidos, fue tal vez el primer chef que tuvo una iniciativa seria de presencia en el móvil, incluso cobrando 5 US$ por la descarga de la aplicación, cosa que ningún chef había hecho antes. El valor de la aplicación de Tyler es que fue una de las primeras en ofrecer una experiencia total multimedia.
Una vez arado el terreno, chefs con mayor fuerza mediática irrumpieron en la escena de las aplicaciones con resultados excelentes. Jamie Oliver, uno de los chefs mas mediáticos que existe, quien maneja un imperio de restaurantes, medios, publicaciones, alimentos y utensilios de cocina, tiene ya dos aplicaciones en el mercado, como parte de su estrategia de promoción y divulgación de información. El posicionamiento que ya tenía Jamie por ser un chef joven e innovador, y con una buena estrategia en medios digitales y redes sociales, fue clave en la rápida adopción de sus aplicaciones.
Mario Batali, chef norteamericano y uno de los principales exponentes de la cocina Italiana, ha fortalecido su herencia con la aplicación Mario BataliCooks, mediante la cual explora las diferentes regiones de Italia con recetas, videos, y todo lo que uno necesita saber sobre la cocina de dicho país.
David Chang, creador de los restaurantes Momofuku en Nueva York, ha aplicado la misma creatividad e ingenio en la cocina, para crear LuckyPeach, una aplicación para iPad que parte en torno a un bol de fideos asiáticos (uno de sus platos insignia) para explorar su propuesta culinaria.
Algunas aplicaciones son gratuitas, generalmente las auspiciadas por revistas o canales de TV de cocina, pero hay muchas aplicaciones en el mercado que cobran algunos US$ para ser descargadas, generando nuevas fuentes de ingreso a los chef. Estas aplicaciones, y todas las que están surgiendo como producto de la armonía entre la gastronomía y la movilidad, están potenciando el acceso a la información en tiempo real, permitiendo a los chefs compartir su conocimiento de forma sencilla con más gente, fortaleciendo su imagen, y a los usuarios teniendo mas acceso a dicha información.
Así como es muy común ver a una persona cocinando con un libro al lado, cada día va a ser mas común cocinar con el celular o una Tablet cerca de los fogones, solo espero que pronto vendan protectores de celular resistentes al aceite caliente.
Por Nidal Barake